Al adquirir una vivienda totalmente terminada, además de ganar una mayor valorización, también contarás con la gran ventaja de mudarte una vez la recibas, pues esta estará lista para habitar; Si estás a punto de recibir tu vivienda este blog es para ti.

Al ser notificada la entrega de tu vivienda, es normal que sientas la necesidad de mudarte de inmediato, sin embargo, es importante que tengas en cuenta que, aunque la recibas  con acabados, existen algunos aspectos que debes evaluar para evitar algún inconveniente a futuro.

En este blog te contaremos los aspectos más importantes, que debes tener en cuenta al momento de recibir tu inmueble con acabados:

1. Medidores de Servicios Públicos: Valida que los medidores de agua, luz y gas se encuentren en buen estado, que sus válvulas funcionen de manera correcta y no tengan fugas.
2. Muros y Placas: La pintura debe tener una textura uniforme, con homogeneidad en los tonos, sin ningún tipo de rayón, fisuras o resaltos; además, la verticalidad de los filos debe ser perfecta.
3. Pisos y enchapes: Se deberá verificar que el revestimiento se encuentre en buenas condiciones, adecuado al piso instalado. Así mismo, se debe revisar que cada pieza se encuentre bien instalada a escuadra con los muros y que no exista desniveles en todo el piso, que las boquillas entre pieza y pieza sean uniformes, del mismo color y sin manchas; que no tenga grietas o alguna pieza desportillada, quebrada, piezas huecas, desprendidas o quebradas. Que las uniones y terminaciones estén bien instaladas y/o pegadas.
4. Carpintería, Metálica, Madera y Aluminio: Es importante validar que en todas las zonas en las que se encuentre una ventana, se confirme si abre y cierre sin problemas; que el sistema de bloqueo esté en perfectas condiciones y que no requiera de ningún tipo de esfuerzo adicional para poder usarlo; que las ranuras de deslizamiento estén firmes y, en caso de poder hacerlo, que se pueda sacar la ventana para el adecuado mantenimiento. Los cristales, no deben presentar fisuras y/o grietas.

Con respecto a las puertas, ya sean de madera y/o metálicas, se debe probar que todas abran y cierren correctamente, que no rocen con el piso o que no estén alineadas con el marco, deben abrir y cerrar sin obstrucciones o sin tener que hacer algún tipo de fuerza adicional. Comprueba que los botones de seguridad de las chapas funcionen adecuadamente.

Si en la vivienda existe algún elemento metálico, se deber revisar que esté en buenas condiciones, que no presente rayones, abolladuras y óxido, además que su pintura sea homogénea y con buena textura.

5. Aparatos y redes hidrosanitarias: Valida que los sanitarios y lavamanos no estén fisurados, golpeados y que la porcelana se encuentre en buenas condiciones, además, revisa que los puntos de desagüe no tengan filtraciones y que el paso del agua por el embolo no genere goteo. Todas estas mismas observaciones se deberán hacer en el lavadero y cocina.

6. Puntos eléctricos: Corrobora que los circuitos sean correspondientes a la normativa y cumplan con la capacidad requerida dentro del inmueble, además de revisar que los breakeres, swichería funcionen adecuadamente.

Es importante recordar que, de la primera revisión que se haga al recibir la vivienda, dependerá el cumplimiento de la garantía por parte de la constructora, ya que, cualquier novedad que se presente en el momento, se debe dejar por escrito en el acta de entrega.

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